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martes, 27 de octubre de 2020

Control de los riesgos sanitarios de la COVID-19 mediante la regulación de conductas: enseñanzas del caso español


Hace un par de semanas participé como ponente en el seminario Auditoría jurídica a la pandemia de COVID-19 (sus sesiones están disponibles online, aquí). Presenté una ponencia con el título de esta entrada del Blog, en la que intento analizar la (dudosa) racionalidad instrumental de la estrategia de las autoridades sanitarias españolas para intentar controlar los contagios en esta pandemia a través de limitaciones a la libertad individual. (Me había ocupado antes del tema ya en varias entradas de este Blog: véase aquí, aquí, y aquí.)

El texto revisado y ampliado de la ponencia está disponible ahora en la Tribuna de debate de la Fundación Internacional de Ciencias Penales, en el siguiente enlace:


Y también en la Revista Foro FICP (nº 2020-3), disponible aquí:


La conclusión de mi ponencia es más bien desoladora: la combinación de unas medidas sanitarias muy insuficientes y de unas normas de regulación de conductas mal diseñadas y aún peor comunicadas, unida a la ausencia casi total de medidas estructurales y de participación ciudadana, abocan casi inevitablemente al fracaso de la estrategia de contención de la pandemia. Fracaso que, a estas alturas de año, resulta evidente para cualquiera que quiera mirar de frente los hechos, a la vista de las cifras de contagios y de personas enfermas, acompañadas de una enloquecida huida hacia adelante de las autoridades, que se afanan en restringir (casi siempre saltándose la Constitución y las leyes) libertades y en amenazar a la ciudadanía, sin resultado apreciable (beneficioso, porque perjudiciales, vaya si los está habiendo...).

(Por supuesto, la pregunta que inmediatamente surge es: ¿por qué lo que resulta evidente para cualquiera -el fracaso de la estrategia de contención de la pandemia- no lo es para quienes deciden? ¿Se trata de ceguera voluntaria -para no reconocer los propios errores y no rendir cuentas- o del conocido sesgo cognitivo consistente en la ilusión de control, en virtud de la cual los éxitos son responsabilidad nuestra y los fracasos cuestión de mala suerte?)


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