Sigo siempre con aprecio las narraciones que construye Diego San José, tanto para el cine como para la televisión. En consecuencia, estos días he estado viendo esta mini-serie, sobre la relación entre un entrenador de bádminton y la jugadora adolescente a la que entrena.
Como pasa siempre con las obras de este guionista, uno se encuentra a unos personajes bien definidos, una trama clara y unas vicisitudes interesantes y bien contadas. (Y, como suele ocurrir también, la realización cinematográfica resulta ser, en términos formales, más bien convencional...)
Y, sin embargo... y, sin embargo, mi impresión como espectador ha sido, en general, de insatisfacción, No por lo que se narra, sino, precisamente, por lo que no se narra.
En efecto, desde mi punto de vista, la historia de redención de Joserra, un cincuentón fracasado, víctima de la crueldad social (abusos sexuales, fracaso profesional y familiar, adicciones, etc.), resulta un tanto tópica (a pesar de que el personaje esté magníficamente servido por la interpretación de Javier Cámara). Quizá porque estemos cansados -yo, al menos, lo estoy- de retratos compasivos, y un tanto autocomplacientes, del fracaso y la impotencia del macho.
En cambio, hay un tema subyacente en el argumento de la serie que a mí me parece que era mucho más sugerente: el de la transformación de Mar (Carla Quílez), esa adolescente que es extraída de su entorno familiar y escolar (retratado con dos brochazos, de manera un tanto tópica) y, a través de la entrada en el universo de la competición deportiva, convertida en alguien que aspira a ganar y a llegar a la cumbre. ¿Qué ocurre cuando pasas de ser una casi niña insignificante a un personaje importante, siquiera sea en el pequeño microcosmos del bádminton? Me hubiera gustado ver una serie que profundizase en esta cuestión: convirtiendo a Mar en el personaje protagonista; y no -como ocurre efectivamente en la serie- como un mero muro/ espejo en el que el personaje principal, Joserra, pueda llegar a autorreconocerse y hallar el camino para su salvación.
