Aparecido en el nº 250 (agosto 2016) de Le Monde Diplomatique en español, este reportaje, en pocas líneas, retrata muy certeramente la fuente de donde surgen mayoritariamente los combatientes irregulares de tantos grupos armados que proliferan por el mundo: una sociedad desestructurada, una juventud sin oportunidades educativas ni laborales y la búsqueda de una identidad propia de la que poder sentirse "orgullosos"...
Nada nuevo, en realidad. Pero hay que recordarlo, y alabar la claridad de ideas, en tiempos en los que, como ocurre en los actuales, tantas idioteces se afirman con toda convicción -o apariencia de tenerla- acerca de la explicación "científica" del "terrorismo".