Escribo esta nota tan sólo para llamar la atención sobre esta rareza, que no es tan conocida como otras películas similares y, sin embargo, merece ser vista y revisada.
Se trata, en efecto, de otra más de las numerosas películas acerca de gangsters y outlaws que proliferaron en el cine norteamericano de comienzos de los años 30. Aquí, se trata de un gangster diferente: más inteligente, menos violento, más sutil. Pero la película acaba por contarnos idéntica historia de ascenso, derrota y muerte, que todas las demás del género. Eso sí, de un gangster apegado a su familia y que pretende cambiar de vida, aburguesarse (aunque no lo consiga)...
Como en otras películas del momento (al poco de haberse iniciado la producción en serie de películas sonoras), es posible detectar en esta algunos experimentos en el empleo del sonido diegético como forma de dar expresividad a emociones y a información que no aparece en pantalla. Ello, más el característico tono visual del cine del género de la época, y la peculiaridad del personaje protagonista, hacen que bien merezca la pena ver esta notable -y desconocida- película y disfrutarla.