Es sabido que el Grupo PRISA viene desarrollando hace muchos años, una campaña de intoxicación propagandística en contra del régimen político de Venezuela. Campaña en la que (siguiendo al pie de la letra los manuales de guerra psicológica) parece que vale todo: incluidas las mentiras y las ocultaciones.
Para muestra, un botón, de la edición de hoy del diario El País:
Venezuela aprueba una polémica ley antiterrrorista
La ley, aprobada en un solo día, en una maratoniana sesión de diez horas, define en su artículo 4 como “delincuencia organizada” a “cualquier acción u omisión de tres o más personas asociadas por cierto tiempo con la intención de cometer los delitos establecidos en esta ley"
Dice el Código Penal español (artículo 570 bis):
"A los efectos de este Código se entiende por organización criminal la agrupación formada por más de dos personas con carácter estable o por tiempo indefinido, que de manera concertada y coordinada se repartan diversas tareas o funciones con el fin de cometer delitos."
¿Observa usted alguna diferencia entre el precepto de la ley venezolana y el de la española. ¿No? Pues, aunque usted no lo sepa, la primera es -así nos lo asegura el "periódico global en español"- una norma perteneciente a una dictadura, o casi (a un "Estado canalla"), mientras que la segunda es la propia de un "Estado social y democrático de Derecho", integrante de la "Europa civilizada".
¿Quién dijo manipulación?