Ayer pude ver, por primera vez, esta película de Sam Peckinpah, la última que dirigió. Interesado desde siempre por su obra (con películas tan grandes como The wild bunch, Major Dundee, Bring me the head of Alfredo Garcia, The getaway,...), esta película sorprende por su combinación de desaliño argumental y fuerza visual.
Dos críticas lúcidas al respecto:
En resumen: una curiosidad, para aficionados a Peckinpah.