Leyendo La vida breve hoy, resulta difícil no apreciar la lucidez del retrato (de la existencia contemporánea). Mas también parece imposible no apercibirse de la inusitada crueldad y falta de caridad de dicho retrato. Una crueldad y una ausencia de caridad que, cabe decir, resultan tan inequívocamente -y desgraciadamente- masculinas...