Paolo Sorrentino lo ha vuelto a hacer: al igual que ocurría ya en La grande bellezza, en Youth opta por volver elaborar una de sus ya características combinaciones narrativas, mixturas de elementos radicalmente disímiles,que se entrechocan, para acabar por provocar en el espectador (subrayo: masculino -la mirada de Sorrentino parece claramente sesgada desde una perspectiva de género) un efecto también de choque. (O, cuando menos, intentar provocarlo.)
viernes, 12 de febrero de 2016
Youth (Paolo Sorrentino, 2015)
Paolo Sorrentino lo ha vuelto a hacer: al igual que ocurría ya en La grande bellezza, en Youth opta por volver elaborar una de sus ya características combinaciones narrativas, mixturas de elementos radicalmente disímiles,que se entrechocan, para acabar por provocar en el espectador (subrayo: masculino -la mirada de Sorrentino parece claramente sesgada desde una perspectiva de género) un efecto también de choque. (O, cuando menos, intentar provocarlo.)