Este libro (Siglo XXI, 2018) es una larga entrevista que Perry Anderson realiza a Suleiman Mourad, experto en historia de la civilización y del pensamiento islámico.
En la entrevista, se hace un largo recorrido por los orígenes históricos del islam (analizados con la perspectiva rigurosa del historiador cultural, que no deja arrastrar por la mitología apologética), sus conexiones con las otras religiones próximas (judaísmo y cristianismo) y sus dificultades para construir una visión del mundo propia, que se adaptase a las necesidades prácticas de las diferentes sociedades, comunidades culturales y estructuras políticas que fueron existiendo en el seno del islam.
Se exponen también las fuentes de las diferentes formas de concebir el islam a partir de la llegada de la modernidad a aquella civilización (esencialmente, a causa de la interferencia europea, desde las cruzadas en adelante). Se rastrean los orígenes culturales y políticos del wahabismo y de los movimientos integristas de la contemporaneidad, así como su problemática relación con las comunidades islámicas y con los diferentes regímenes políticos de los estados con mayoría de población musulmana.
Por fin, se viene a poner de manifiesto cómo, frente a esencialismos de toda laya (tanto el de los propios integristas musulmanes como el de sus enemigos declarados, los islamófobos racistas occidentales), que pretenden remontar hasta un pasado ancestral los orígenes de los modernos fenómenos de integrismo musulmán, y de lucha armada desarrollada en su nombre, lo cierto es que el islam (todas sus tradiciones interpretativas, aun las más conservadoras o reaccionarias,como el saslafismo), por regla general, han ido bandeándose con las necesidades de la adaptación a la modernidad, manteniendo discursos diversos en relación con la misma, pero rara vez discursos abiertamente hostiles, y militarmente hostiles. Por el contrario, el ascenso del integrismo islámico armado (del "terrorismo islámico", por emplear la jerga islamófoba occidental al uso), aun cuando poseer ciertas raíces ideológicas y culturales en dichas tradiciones, se explica en mucha mayor medida (como, por lo demás, la evolución de cualquier hecho religioso, islámico o no) por las circunstancias sociopolíticas (internas) y geopolíticas (externas) de las sociedades (mayoritaria y hegemónicamente) musulmanas, de los estados que las gobiernan y dominan, así como de la relación de occidente con dichas sociedades, dichos estados y dicha cultura.
Un libro muy interesante, en suma. Que permite adentrarse con información rigurosa en temas que -como el del integrismo islámico y sus manifestaciones políticas y militares- usualmente son tratados, en Occidente, sobre la base de una siniestra combinación de ignorancia y racismo, que a nada bueno puede conducir, ni en términos de conocimiento del fenómeno, ni tampoco cuando se trata de diseñar políticas para encararlo.
